Nuestra amazonía goza de muchos recursos, árboles milenarios dando sombra, zona de orquídeas, ayahuasca, lluvias enriquecidas de nutrientes, suelos ricos en materia orgánica y sin duda contamos con la altura óptima para producir uno de los mejores cafés de América Latina.
Cuando se recolecta el café, los granos tienen que experimentar un largo proceso hasta terminar en las tazas de café.
En dicho proceso, las cerezas o frutos del cafeto han de abrirse para sacar las semillas o granos, retirando la pulpa que las protege, mediante un proceso en húmedo o en seco, para que una vez terminado el proceso se obtenga un grano limpio, al que se llama café pergamino, café oro o verde , dependiendo del método que se haya utilizado.